Soy de la U y el sábado no estuve en el estadio. La verdad es que en los últimos cinco años solamente he ido una vez a ver un clásico, y confirmé lo que ya sabía. Ya no daba gusto, ya no me sentía seguro, ni siquiera en el estadio de mi equipo. Por eso vi el último clásico sentado en un café comiendo y viendo el partido por televisión. Disfrute muchísimo del gol en el último minuto y le dije a mi mujer que ese gol era la última perla de un día perfecto, bello y memorable. Poco después todo había cambiado, la incredulidad fue remplazada por indignación y esta por furia, en la medida que pasan los días y escucho los comentarios de los dirigentes de los clubes. Escucho a un dirigente de la U decir que jugar sin público sería retroceder en lo logrado, y la vergüenza me invade. De que logros está hablando, debo ser ciego por no haberlos registrado, debo estar viviendo en otro planeta. Todos lamentan la muerte de Walter, pero piden de manera asolapada que no haya cambios. Que es un pro
El topo aunque rechoncho tiene un hocico afilado y sabe socavar para abrir nuevas galerías. Se alimenta de gusanos y larvas de insectos. Le gusta acurrucarse y rodearse de noble tierra. Ahora ha encontrado una atalaya. Desde allí aprecia, registra, inquiere y averigua todo lo que esté a su alcance. Es un ladrón de miradas. Es un reciénvenido.